Por fin han llegado Calixto y Marc hoy, junto con el diluvio universal.
Menudo tormentón! He tardado dos horas de reloj en poder siquiera pensar en irme del local de ensayo.
Con Marc... Old pals! |
Me he sentido como Sam. |
y los asistentes, dramaturgos, los productores, y más gente que no había visto en mi vida, todos sentados
pegados a sus cafés
como en un picnic interior en cuatro o cinco mesas heterogéneas pegadas las unas a las otras.
Calixto ha hecho el speech inaugural, explicando lo que todos querían saber con respecto a la obra (porque los actores no sabían NADA en absoluto).
Y sí, se llama "Leonce und Lena, la noche oscura del alma - basada en la obra de Büchner"
Y no, nadie va a ser Leonce y nadie va a ser Lena, ni Rossetta, ni Valerio, ni va a haber narración alguna.
Será un poema de Bieito, con sus imágenes fuertes y su lírica. Un poema sobre el aburrimiento, la melancolía, la culpa y el suicidio.
Y hay que tener un par de huevos para hablar de eso sin tapujos, porque la gente normalmente piensa "pues menudo rollo" o "como si no hubiera ya bastante con lo que hay" o se ve directamente casi como pornografía emocional.
Siempre me acuerdo de un amigo al que le gustaba el metal y me decía, indignado:
- No soporto que sean simpáticos entre tema y tema.
Y yo le decía muerta de risa que cómo no iban a serlo, si cada día se hacían un exorcismo la mar de sano pegando gritos y hablando de lo más oscuro que se les ocurría.
Así que me siento tan feliz de poder hablar de esos temas en mi música, en mis palabras y mi lenguaje. Por eso me gusta tanto trabajar con Bieito, me recuerda que lo importante es hablar de lo que de verdad te importa y te excita y te intriga y te obsesiona. Todo lo demás es tontipop.
:)