martes, 9 de abril de 2013
El hueco donde estaba mi piano.
Lo echo de menos, la verdad.
En la pared con mejor feng shui, sin su tapa, con sus tres pedales
Tocando con la sordina hasta bien entrada la madrugada
Cómo lo echo de menos.
CUANTÍSIMO
LO ECHO DE MENOS.
Escribir canciones con el trasto este de plástico no tiene nada que ver.
Quién tiene un piano... a ver...
Ojalá me pudiera quedar en el Romea a dormir. Wouldn't that be something.
Son estas horas las buenas, las de más provecho.
Pájaro nocturno, échate un vuelecito, pasa la verja hacia el otro lado
Somos paquidermos, paquidermos.
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