Domingo de Reflexión. Algo va mal.

Lo sé. Lo tengo claro. En el momento en el que no te mojas algo va mal. En el momento en que tienes encima a alguien que te hace mirar hacia arriba algo va mal. En el momento en que algo tendría que ser excitante y no lo es.
En el momento en que te molesta que pele el melocotón como una gallina. En el momento en que le retas para que lo haga bien y no lo consigue, y además el melocotón se impregna del sabor a ajo de la tabla de cortar porque no la ha lavado previamente, en el momento en que no hay lucha, en el que necesitas asertividad y nadie decide qué hacemos.
Yo sólo quiero que funcione y cada vez funciona menos, y el melocotón, casi triturado, con pinta de intestinos más que de melocotón, empaña su talento artístico, su sensibilidad, su devoción y su sinceridad.
Pero no mi miedo a perderle, ni mi miedo a repetir la misma historia otra vez, sin ningun tipo de variante. Mi miedo sigue muy vigente. Mi mejor amigo expuesto otra vez al mismo dolor, por mi misma culpa. Y yo no soportaré estar lejos de él, porque es mi compañero.
Y yo no soportaré decirle otra vez que no funciona.
Y yo no soportaré quedarme.
Y yo no soportaré irme.
Y yo no soportaré quedarme.
Y yo no soportaré irme.

Y hasta aquí el razonamiento.

Es más noble, es más respetable pararlo todo ahora, en lugar de quedarme diciendo una verdad a medias, dejando que lo bello de lo que tenemos se empañe de melocotón. Lo sé. Lo sé Lo sé!!! Lo sé.

Y si esto es lo mejor, lo mejor a lo que puedo aspirar? No le hagas esto, y no te hagas eso, M--- pero M! es que no me veo viviendo happily ever after, con un hombre del que esté enamorada, no me imagino con uno de esos tíos tan hombres, con un hombre de acción que me folle de pie,

No me veo enamorada sin sufrir, sin necesitar su sexo noche y día hasta que él se harte y se aburra de sentirse requerido y haber dejado de cazar, y yo me vea abandonada y vulnerable y destrozada.

Una relación equilibrada, una de esas de bonita casa, vino en la cena, este fin de semana vamos a jugar al badminton y el que viene nos vamos a la ópera. Por qué no? Por qué no va a ser eso para mí?

Soy artista, me dedico a eso, a eso que no hace la gente estable

Pero él puede admirarme a pesar de ser diferente. Por qué no va a admirarme? Soy buena en lo que hago - y él probablemente no sea capaz de hacerlo, y seríamos fuertes en nuestras polaridades.

Sentiré que tengo que pasar más tiempo en el gimnasio para merecerle.

Él ganará más que yo

Sentirá lo mismo

Yo me pasaré la vida depilándome e intentando estar guapa para que no se vaya.

Él estudiará el caso y se dará un poco más de tiempo para ver cómo evoluciona nuestra relación, aunque lo tendrá igual de claro que yo ahora.

Yo estaré en vilo. Cuanto más en vilo esté, más desesperada, más débil, más dinero en peluquería y maquillaje, y menos funcionará todo.

Se irá a la mierda porque nunca hubo comodidad entre los dos. Yo me culparé.